Choriqueso versión mi tía Ani

La mayoría de las veces, procuro poneros recetas sanas, aptas para todos los bolsillos y todos los gustos; procuro que no sea un exceso para nuestro cuerpo... pero en ocasiones, el cuerpo mismo pide un caprichito. Hoy, ese caprichito, se produce con esta receta. No voy a poneros una foto de los ingredientes y del paso a paso completo, porque son pasos muy-muy conocidos, que todos conocemos. 

Así que aquí va el recetón, claro homenaje al todopoderoso gorrino y sus andares...

INGREDIENTES PARA CUATRO PERSONAS:

- 5 o 6 patatas medianas (si son muy pequeñas, 8 o 10)

- Tres tripas de chorizo (yo lo compro un poquito picante, para que le dé ese toquecito rico; el Chorizo de Ardales, es el mejor para esto, pero si no tenéis Ardales cerca, todo chorizo está bueno, porque viene de ese maravilloso y mágico animal que está bueno hasta en sus andares).

- Queso semicurado de cabra (o cualquiera que tengáis), rallado. Podéis usarlo también del que se vende envasado, especial para gratinar.

- Orégano

- Sal

RECETA:

Primero, cortamos las patatas en tiritas, las salamos y las freímos. Podemos usar la freidora, o la sartén; personalmente, prefiero la sartén, porque no se mezclan aceites, y salen más ricas. Eso sí, freídlas hasta que estén doraditas, no demasiado tostadas.

Seguidamente, cortamos el chorizo en trozos pequeñitos, y lo pasamos un poquito por la sartén; no demasiado, con un par de minutos bastará.

Una vez estén listas las patatas y el chorizo, lo ponemos todo en una fuente especial para horno, y lo espolvoreamos con el queso rallado. Para que quede más jugoso, podéis poner entre las patatas y el chorizo unos cuantos trozos de queso entero, sin rallar, para que al introducirlo en el horno, se derrita y queden las patatas impregnadas. Eso sí, lo importante es que la parte de arriba quede cubierta por el queso.

Espolvoreamos un poquito de orégano.

Lo metemos en el horno, a gratinar 180ºC, durante 15-20 minutos. Lo sacamos en cuanto se dore, con el tono que más o menos muestra en la foto. Ahora creo que comprenderéis por qué os he dicho que no "tostemos" demasiado las patatas y el chorizo: al ir al horno, con el calor del horno, se tostarán un poquito más, y no queremos que se quemen, ¿no?

Y ya tenemos el choriqueso listo!!!

Este es un plazo que no debe comerse todos los días de la semana, pero os puedo asegurar que es de los más ricos y sencillos que he hecho nunca, y es un gustazo comerlo ;)

Buen OINK-FINDE  a todosssss!!!